Un nuevo hogar...(Libre)

Recien habiamos llegado con toda mi familia a la casa que mi padre habia comprado cerca de la familia Montesco. Era una mansion hermosa, con unos jardines maravillosos y mi habitacion era de ensueño, con un enorme balcon desde donde se podia observar el mar. Despues de acomodar algunas de mis cosas, baje a la sala para reunirme con mis hermanos y ver cuales eran sus planes.

Edward estaba muy emocionado por que al fin veria a su amigo Romeo, al que no veia desde hacia dos años, y mi hermana Alice ya estaba planeando el primer tour por la ciudad y su primer paseo de compras por Verona.
Ella queria incluirme en sus planes, pero la verdad que me sentia demasiado cansada por el viaje como para encima acompañarla a una de sus maratones de compras.
Alegando esto me disculpe con Alice, y me encamine hacia el jardin para disfrutar un poco de la tarde.
No se cuanto tiempo permaneci ahi, pero el ruido de la campana de la entrada llego hasta mis oidos. Movida por la curiosidad de saber quien podria haber venido hasta nuestro hogar en nuestro primer dia ahi, fui hasta la sala para ver de quien se trataba.

No podia creer lo que veian mis ojos. Era nada mas ni nada menos que Portia la madre de Romeo. Yo la conocia desde hacia años y siempre habia tenido una muy buena relacion con ella, pero hacia tiempo que no la veia.
Estaba igual de hermosa que siempre. Ella me saludo efusivamente en cuanto mevio, e incluso me hizo sonrojar cuando me dijo que me veia hermosa. Luego me observo por un momento con aire pensativo, yo tambien la observe y me percate de que sus ojos se veian tristes. Eso me llamo la atencion, ya que Portia siempre habia sido una mujer muy alegre. Decidida a saber que le pasaba, la tome de la mano y la arrastre hasta el enorme sofa de la sala. Una vez que nos sentamos le dije:
- ¿Como estas? Hace mucho que no recibimos cartas tuyas, y Romeo ultimamente casi no nos escribe y cuando lo hace no nos dice nada sobre su familia. ¿Esta todo bien?